Fascitis plantar - Espolón Calcaneo

La fascia plantar esta formada por bandas de tejido longitudinales de tejido conjuntivo fibroso y denso. Posee una zona central gruesa y unas partes medial y lateral más débiles. Estas bandas mantienen unidas las partes del pie, contribuyendo a proteger la cara plantar del pie de las lesiones. Ayuda a mantener los arcos longitudinales del pie.

¿PORQUÉ DUELE?

La inflamación de la fascia plantar es muy frecuente en la practica deportiva, especialmente si concurren factores de riesgo, como alteraciones de la estática del pie, obesidad, artropatías, etc. Los microtraumatismos de repetición suelen ser el factor desencadenante. El dolor suele aparecer con la bipedestación y aumentar con la marcha. Es mayor por las mañanas, o tras reposo prolongado.

¿CÓMO SE DIAGNOSTICA?

Se suele realizar por clínica y ecografía. El estudio radiológico simple puede mostrar la presencia de espolón calcáneo, aunque este no siempre es la causa del dolor.

¿CÓMO SE TRATA?

El primer tratamiento conservador suele ser el medico, mediante analgésicos y antiinflamatorios. La segunda opción, si la primera no da resultado, es el tratamiento fisioterápico mediante medidas físicas. Otros tratamientos específicos que evidencian buenos resultados son la Ondas de Choque de tipo radial y la Electrolisis percutanea intratisular (EPI). También es aconsejable el uso de crioterapia así como los estiramientos. De vital importancia resulta la identificación y corrección de los factores de riesgo y/o desencadenantes. La opción quirúrgica es el último eslabón de la cadena terapéutica y se debe de reservar para los casos crónicos muy invalidantes.

EJERCICIOS QUE PUEDEN AYUDARTE

Los ejercicios de estiramiento para su pie son importantes. Haga los ejercicios de estiramiento que aquí se muestran por lo menos dos veces al día. No rebote cuando se estire.

El diagrama superior muestra el estiramiento de la fascia plantar. Para hacer este estiramiento párese derecho con sus manos contra la pared y la pierna que tiene lesionada ligeramente atrás de la otra pierna. Manteniendo los talones completamente apoyados sobre el piso, lentamente doble ambas rodillas. Usted deberá sentir el estiramiento en la parte baja de su pierna. Mantenga este estiramiento durante 10 a 15 segundos. Repita el estiramiento entre 6 y 8 veces.

El diagrama del centro muestra el estiramiento de la pantorrilla. Párese con sus manos contra la pared y su pierna lesionada detrás de la otra pierna. Con su pierna lesionada estirada, su talón plano contra el piso y su pie apuntando derecho, inclínese hacia adelante lentamente doblando la otra pierna. Usted deberá sentir el estiramiento en la mitad de su pantorrilla. Mantenga este estiramiento durante 10 a 15 segundos. Repita el estiramiento entre 6 y 8 veces.

Usted también puede fortalecer los músculos de su pierna parándose sobre la eminencia metatarsiana al borde de un escalón y empinándose lo más que pueda sobre los dedos de sus pies. Descanse cada vez que levante los pies y los baje y deje que su talón descienda un poquito más abajo del borde del escalón.

También es útil estirar el pie agarrando una toalla con los dedos de los pies como si fuera a recoger la toalla con los pies. Repita este ejercicio varias veces al día.